Con el crecimiento de la inteligencia artificial (IA) en el ámbito empresarial y la vida cotidiana, México enfrenta el desafío de regular su uso y mitigar los posibles riesgos asociados. Actualmente no existe una ley específica que regule la IA en México, pero las autoridades y el sector privado han comenzado a abordar este tema. Algunos puntos clave interesantes incluyen:
- Responsabilidad en el uso de IA: En varios sectores como la salud, el transporte y la seguridad, donde la IA ya desempeña un papel significativo, surgen cuestiones sobre quién es responsable en caso de errores o daños causados por algoritmos. Existen iniciativas para definir la responsabilidad de los desarrolladores y operadores, incluyendo la necesidad de garantías éticas y de transparencia en los algoritmos utilizados.
- Protección de datos y privacidad: El uso de IA requiere grandes cantidades de datos personales, lo que plantea riesgos de privacidad. Las empresas deben garantizar que el procesamiento de datos respete la Ley Federal de Protección de Datos Personales en Posesión de los Particulares (LFPDPPP), especialmente si utilizan IA para analizar o predecir el comportamiento de los usuarios.
- Desafíos en derechos de autor: Otro aspecto clave es la titularidad de las obras generadas por IA. Actualmente, la ley de derechos de autor no contempla específicamente obras creadas por sistemas de IA, lo que genera incertidumbre legal sobre quién puede reclamar los derechos de propiedad intelectual de dichas creaciones.
La regulación de la IA en México está en su etapa inicial, pero la tendencia global sugiere que en el futuro próximo será necesario un marco normativo específico para proteger tanto a los usuarios como a los desarrolladores y empresas que implementan esta tecnología.